Cuando hablamos de higiene bucal, la mayoría de las personas se centra en cepillarse los dientes, pero uno de los aspectos más olvidados es la limpieza de la lengua. Sin embargo, la lengua juega un papel crucial en nuestra salud bucal. Si deseas mantener tu boca fresca y saludable, no basta con cepillarse los dientes; también es fundamental dedicarle atención a la limpieza de la lengua. Y, si no tienes muy claro cómo hacerlo, ¡sigue leyendo!

¿Por qué es importante limpiar la lengua adecuadamente?

La limpieza bucal no debe limitarse únicamente al cepillado de los dientes, algo que muchos de nuestros pacientes en la clínica tienden a hacer de manera rutinaria. Si realmente quieres mantener una higiene completa y evitar malos olores, es crucial que también prestes atención a la limpieza de la lengua.

La lengua alberga irregularidades y surcos que actúan como refugios para las bacterias, lo que puede contribuir al mal aliento debido a los gases que las bacterias emiten. Muchos dentistas coinciden en que “cuidar la lengua es tan importante como cepillarse los dientes y usar hilo dental”.

Ventajas de limpiar la lengua

Limpiar tu lengua no solo combate el mal aliento, sino que ofrece una serie de beneficios para tu salud bucal en general:

  • Previene el mal aliento (halitosis): Aunque cepillar la lengua no proporciona un alivio duradero para el mal aliento, es un paso clave para mantener tu boca saludable.
  • Elimina bacterias: La limpieza de la lengua ayuda a reducir las bacterias que causan caries dental. La mala higiene bucal, incluida la limpieza de la lengua, está relacionada con problemas de salud más graves.
  • Mejora el sentido del gusto: Limpiar tu lengua también puede ayudar a mejorar la percepción de los sabores, ya que elimina el recubrimiento bacteriano que puede afectar las papilas gustativas.
  • Evita la lengua vellosa: El raspado de la lengua previene la acumulación de tejido muerto, evitando la condición conocida como lengua vellosa.

¿Cuál es la mejor forma de limpiar la lengua?

La herramienta más común para limpiar la lengua es el raspador de lengua, que generalmente tiene superficies rugosas y suaves diseñadas para eliminar las bacterias y restos alimenticios. También existen cepillos de lengua, aunque son más recientes. Otros dispositivos como el hilo dental y los enjuagues bucales también pueden complementar esta tarea de higiene.

Existen muchos materiales distintos de los cuales están hechos los dispositivos de limpieza. Los materiales comunes son:

  • Metales: Los raspadores de acero inoxidable y cobre son duraderos y se pueden esterilizar al sumergirlos en agua caliente.
  • Plástico: Los raspadores de plástico son más asequibles, pero no duran tanto y necesitan ser reemplazados con mayor frecuencia.
  • Silicio: Los raspadores de silicio son suaves y ofrecen una experiencia más cómoda para quienes tienen sensibilidad.

Es posible que prefieras un material sobre otro, por lo que te recomendamos probar varios para ver cuál te resulta más efectivo y cómodo.

Consejos adicionales de higiene sublingual

  • Usa una cucharita como raspador: Si no tienes un raspador de lengua a mano, una cucharita común puede servir como una opción alternativa para raspar la lengua.
  • Ten cuidado con el enjuague bucal que utilices. Si bien la mayoría funciona bien, más es lo que te pueden perjudicar que favorecer ya que queman e irritan tu lengua o papilas gustativas y las inflaman. Compra un enjuague bucal que sea suave.
  • Si normalmente respiras por la boca, respira por la nariz cuando limpies tu lengua a fin de que puedas evitar las náuseas.

¿Quieres tener un aliento fresco? Limpia tu lengua

La limpieza de la lengua es un paso fundamental en tu rutina de higiene bucal. Además de combatir el mal aliento, previene problemas dentales, mejora tu sentido del gusto y mantiene tu boca libre de bacterias. ¡No olvides limpiar tu lengua a diario y cuidar cada parte de tu boca!